Cuenya. Foto de Saúl Arén
Te agradezco, Mar Iglesias, esta entrevista para La Nueva Crónica acerca de los cursos de escritura creativa que vengo impartiendo desde hace años en la Universidad de León, tanto en el Campus de Ponferrada como en la ciudad de León (Centro de Idiomas de la ULE).
Os dejo el enlace. Qué lo disfrutéis. Salud.
–¿Cuántos cursos de este tipo ha protagonizado hasta ahora y qué balance hace de ellos?
-Llevo ya un montón de cursos impartidos, tanto en León como en el campus de Ponferrada (cursos de extensión universitaria de la ULE). Como tales cursos comencé a impartirlos allá por el 2010, creo recordar. Hace unos diez años. No obstante, imparto cursos de escritura creativa desde 2001 en la que fuera la Escuela de cine de Ponferrada como materia obligatoria para la especialidad de guión. El balance que hago es realmente positivo, pues puedo decir, con orgullo y satisfacción, que por estos cursos han pasado alumnos/as que en la actualidad ya han publicado algún libro. Son varios. Y eso me entusiasma. Son cursos eminentemente prácticos, en los que el alumnado se familiariza y pone en funcionamiento las técnicas de la escritura, leyendo, escribiendo y reescribiendo textos, relatos a lo largo del curso, que se corrigen tanto en la clase como fuera de la misma. Un trabajo intenso y estimulante tanto para los estudiantes como para el profesor.
- ¿Con qué formación suelen llegar al curso y con qué inquietudes?
-Se inscriben personas con toda suerte de formaciones, aunque algunas afines al periodismo, la filología, etc. Y por lo general son personas con la inquietud por aprender y mejorar su escritura, incluso quienes ya han coqueteado con la escritura creativa, quienes ya han hecho sus pinitos en este mundo fascinante de la escritura.
-¿Cuál es el perfil de los alumnos? ¿Suelen continuar con más cursos para perfeccionar?
-Existe todo tipo de perfiles. Y sí, suelen continuar con más cursos. Tanto en León como en Ponferrada imparto un nivel inicial, uno intermedio y aun otro avanzado.
-¿Han ido cambiando sus intereses con los cambios sociales que se han ido sucediendo?
-Es evidente que cambiamos de intereses en función de los cambios sociales. Hay autores o textos clásicos que no llegan al alumnado como en otras épocas. Sin embargo, la gran literatura universal, Hesse, Dostoievski, Delibes, por poner solo algunos ejemplos, sigue llegando a casi toda la población.
-¿Entra en la cultura del whatsApp el aprendizaje en escribir o hoy día interesa menos hacerlo?
- El deseo por aprender a escribir de forma creativa sigue manteniéndose, a pesar de que vivamos en la época de lo virtual, de lo audiovisual. La palabra escrita sigue teniendo un gran poder. Y llegará un momento, no tardando, en que volverá a ponerse en valor la escritura creativa. No olvidemos que el pensamiento, al menos una gran parte, se articula a través de la palabra, de la escritura, que tal vez no se la lleva el viento.
-En el curso se le ofrecen claves para iniciarse en la escritura ¿cuáles considera que deben ser las fundamentales?
- En el curso, sobre todo en el nivel inicial, se ofrecen claves para abordar un texto, un relato, como la trama/subtramas, la estructura, el narrador o narradores y punto o puntos de vista desde donde se cuenta la historia, los estilos, entre ellos el directo, indirecto, el monólogo interior, la economía narrativa, la precisión verbal, los diferentes tonos y registros lingüísticos, el tiempo, el espacio, la escritura con los cinco sentidos...
-No les debe faltar ¿qué?, ¿qué les recomienda a la hora de enfocarse sobre un folio en blanco?
- Para escribir se necesita leer y releer mucho, leer a autores clásicos, también a nuestros contemporáneos, leer estilos y formas de construir diferentes, leer incluso a autores/as vanguardistas, transgresores. Y sobre todo tener mucho tesón, escribir y reescribir. Dejar reposar lo escrito como el buen vino –nos decía el maestro Antonio Pereira– y volver sobre lo escrito hasta depurarlo. Contar lo esencial de forma sencilla y natural. Y a la vez con profundidad de pensamiento.
Lo importante es que lo que escribamos sea inteligible para los lectores/as, les ayudemos a reflexionar. Y si encima emocionamos con nuestros textos, entonces esas ya son palabras mayores.
https://www.lanuevacronica.com/llegara-un-momento-en-que-volvera-a-ponerse-en-valor-la-escritura-creativa
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