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lunes, 31 de diciembre de 2012

Todo un año, septiembre

Septiembre es un buen mes para viajar a Salamanca, ciudad en la que pasé muy buenos momentos allá por los años 90. Tiempos de juventud y muchas juergas al fin de la noche. Tampoco tantas, no vamos a exagerar. Pero sí disfruté mucho y bien de mi estancia estudiantil en la ciudad charra, antes de emprender rumbo a la ciudad de la mostaza, Dijon ville, donde también estuve durante algún tiempo como Erasmus y luego reenganchado con una beca Leonardo De Vinci. Dijon, la ciudad francesa en la que el lírico y filosófico Henry Miller impartiera clases de inglés, como queda reflejado en su Trópico de Cáncer, y en la que uno hiciera sus pintos como lector/profe de español/castellano. Qué tiempos. 

Desde hace años, aprovecho los inicios de septiembre -que suelen coincidir con las fiestas de la Encina de Ponferrada- para viajar unos días a esta ciudad torera y universitaria, que acoge a muchos estudiantes de todo el mundo, y que, llegadas estas fechas, se viste de luces para salir al ruedo, con sus ferias y sus fiestas. Buenos conciertos en la Plaza Mayor. Buen ambiente. Y muchos grandes recuerdos. 

De fiesta en romería, y tiro porque me toca. Si agosto es mes de jolgorio, septiembre lo prolonga: La Encina, el Cristo de Bembibre... farra asegurada todo el tiempo. Sin embargo, también hay que darle algo a las labores, por ejemplo, a la vendimia, que ya no hago desde que era un adolescente porque las viñas de la Solana y de la (H)idrera de Noceda del Bierzo se perdieron, casi todas, y el Bierzo Alto/alto no es una gran tierra para el vino, o sí, porque antaño Viñales era un lugar magnífico para las viñas (de ahí su nombre). Y el Cepas Viejas, el Bembibre y alguna otra Denominación de Origen tiene su sede en San Román de Bembibre. Casi sin quererlo (o sí) me acabo de meter de lleno en la calle Los Moros, en el lagar del tío Teresín, por cierto el abuelo de Miguel Ángel García, excelente periodista y amigo, desde hace años Corresponsal de TVE en Berlín. 

Ruta Górgora
Septiembre sigue estirando su pescuezo veraniego e invita a salir a pasear, excursionar, hacer alguna ruta de montaña, por ejemplo, los cañones del Górgora (qué difícil, treparse por la Górgona). Ahora que me acuerdo, olvidé hablar de una magnífica excursión, en el mes de junio, a la Campa de Santiago, donde el Boeza nace y crece, la mítica Campa, en la que Chema Sarmiento rodara el inicio de su Filandón. Qué bonita ruta, desde Colinas del Campo de Martín Moro (largo nombre para un pueblo literario) y sobre todo en estupenda compañía.
Campa de Santiago


También olvidé (espero que no me ataque el Alzheimer) mencionar el paseo hasta Primout (la aldea donde impartiera docencia el poeta Ángel González) en el mes de agosto. Qué cabeza la mía.  

Mi sobrino Rodri en Primout

Septiembre no se agota ni en una ni en dos excursiones. Un mes que hizo un clima casi casi estival hasta el final.

A mediados -coincidiendo con El Cristo y Cristín bembibrenses- se celebró el II Encuentro de cine Etnográfico en La Cabrera, y allí que me fui (una vez más, en agradable compañía).

 http://cuenya.blogspot.com.es/2012/09/ii-encuentro-de-cine-documental-en.html 

Una jornada de cine y poesía visual -en realidad fue más de una, pero uno sólo estuvo una tarde-, gracias a la presencia de Julio Llamazares y  Cecilia Urueta, Alonso Carnicer y Sara Grimal, entre otros y otras. Me encantó la subida y la coronación del Morredero, desde donde se atisba casi casi la provincia de Zamora. Qué bueno sería convertirse en pájaro y volar. Admiro a quienes practican parapente, como el amigo César, que en una ocasión me invitó a volar desde Gistredo pero me achanté. Algún día, quizá, me lance a la aventura, de la mano de un experto, naturalmente. 

En el II Encuentro de cine Etnográfico en La Cabrera
En este mes se celebró el Festival de cine de Astorga, que este año homenajeó a la actriz Assumpta Serna y al director Mario Camus, uno de nuestros más grandes directores, ahí quedan sus adaptaciones de Los santos inocentes, La colmena, La casa de Bernarda Alba y algunas otras de enorme valor artístico. 
Foto de familia de la Gala del Festival de Cine de Astorga 2012

A este paso pasito, "no voy dar finalizado" (que diría un hermano galego) el repaso al año... aún hay más. Me quedan octubre, noviembre y diciembre. Si no es en este, los repasaré en el Año Nuevo, que no todo va a ser escritura sino algún que otro paseo por el León de siempre, el León histórico de la Plaza Mayor, el Húmedo, la Catedral, etc. Y en breve toca cena con la familia en la ciudad del Bernesga y el Torío. Hasta otro momento. Sed felices y disfrutad mucho, ahora y siempre. Que las diosas y los dioses (de repente me he vuelto politeísta, y yo que me creía ateo gracias a los dioses y las diosas) os protejan y os ayuden en este camino vital. Abrazos y besos. 

domingo, 30 de diciembre de 2012

Todo un año, de julio a agosto

Hopper-Autorretrato
Llegó julio, con sus aromas a heno y aire caliente, y viajé a Madrid. Vi la expo de Hopper (tenía ganas) y quedé con Maite, que me habló de un concierto de Chavela Vargas en la legendaria Residencia de Estudiantes. Lamentablemente, yo estaba de paso hacia Cuenca, y no puede asistir a su actuación (la última). Qué pena, porque al poco tiempo, la Vargas nos dijo adiós. 
Casas colgadas de Cuenca
Priego-Centro Diego Jesús Jiménez

Viajé a Cuenca (gracias Miguel, gracias Olga por vuestra generosidad) y luego a Priego, donde asistí a un curso de poesía,  ya mítico, que organiza el amigo, profesor y poeta Ángel Luis Luján. Allí nos dimos cita varios entusiastas (algunos buenos poetas y expertos en la materia, como Félix Grande o Manuel Rico, entre otros) en este caluroso y agradable pueblecito conquense (la matria del gran poeta Diego Jesús Jiménez). 


Félix Grande

Me encantó escuchar, sobre todo, a Félix Grande. Qué grande. Un tipo con duende, capaz de hipnotizar al público con sus anécdotas, con su saber, con su decir poético, con su pasión por el flamenco y su balada del abuelo Palancas. Félix Grande, heredero de la poesía de Luis Rosales, César Vallejo y Machado, me entusiasmó. 

Priego es un espacio magnífico para compartir ideas y emociones. Por supuesto, me gustó mucho volver a ver a amigos y amigas, y disfrutar de unos gloriosos días de poesía. 

Ortigueira
Gaiteros escoceses

Casi de empalmada, atravesé la mitad de España para acercarme a Ortigueira, lugar al que viajo desde hace años, para abrazar la llamada música celta. Si bien este año, los conciertos no fueron tan espectaculares y emocionantes como otros años, sí volví a experimentar la sensación placentera de reencontrarme con la belleza de un entorno ensoñador y marino, verdoso y mágico.  Una cita ineludible, el Festival de música de Ortigueira. 

Julio fue también el mes en que celebramos el centenario del escritor Ramón Carnicer en el monasterio de Carracedo, un espacio con solera para homenajear a una de las grandes figuras de la narrativa del siglo XX. Un berciano ilustre e ilustrado que nos dejó una obra estupenda, sobre todo la inolvidable Donde Las Hurdes se llaman Cabrera. Libro de cabecera para quienes amamos el viaje y la llamada literatura de viajes.


http://cuenya.blogspot.com.es/2012/07/carnicer-en-carracedo.html


Cascada Nocedo
El Curueño

Llegó agosto, con su rostro festivo, y me invitaron a hacer un cuentacuentos en Lugueros (Valdelugueros). Y allí que me encaminé, siempre en excelente compañía, a contar la sonrisa de Aicha. Gracias Ángel, gracias Emilio por haber pensado en mí para esta actividad cultural. Lo malo es que aquel día había un montón de actos, con motivo de las fiestas del pueblo, y eso acaba dispersando al personal. No obstante, sí pude hacer el cuentacuentos para al menos una docena de niños/as, algunos jovencitos/as y también mayorcitos/as. Lo mejor de todo fue el viaje hasta Lugueros, un recorrido a través de la Omaña hasta alcanzar la Robla, y desde ahí a la montaña leonesa. Toda una excursión. Y luego el baño bautismal en el Curueño, el río del olvido. Lástima que Julio Llamazares no estuviera por la zona para charlar con él. 

El bautizo en el Curueño avivó a los viajeros. Y los religó con esta tierra cercana y familiar. 
Con Felipe Pérez Pollán en su castillo 

Palacios de la Valduerna me/nos esperaba. A eso de las 17h. Ese mismo día dominical. No obstante, aún quedaban unas horas por delante para tomar un café con leche (ah, y unas madalenas) y visitar la cascada del Nocedo, que es como adentrarse en la catarata de la Gualta de Noceda del Bierzo. Incluso dio tiempo a treparse a la ermita de San Froilán, desde la que se tienen vistas estupendas a la montaña leonesa. El paisaje de las hoces de Valdeteja se me antoja sobrecogedor, como de película transilvaniana. 


El baño bautismal del Curueño fue el preámbulo para un segundo remojo en el Órbigo. De ahí al castillo de Felipe Pérez Pollán hay un paso. Y puntuales, como suizos, los viajeros arribamos al encuentro con la poesía... poesía para vencejos. A recitarles odas al amor y a la naturaleza. Una experiencia inolvidable. El acto lo presentó Martín Martínez y lo amenizaron con sus músicas Tista y Sara e Isaac. 


Al pie del torreón de Felipe, leí (leímos) poemas al viento (sin vencejos), y al público. Y con las mismas, no sin antes tomar unas viandas en un restaurante de la Bañeza (de cuyo nombre no creo acordarme), nos volvimos al Bierzo. 

http://www.diariodeleon.es/noticias/cultura/poesia-para-vencejos-reune-hoy-a-cinco-escritores-y-tres-musicos_713749.html

El periplo recitador y cuentista o cuentero continuó en Astorga, pasados naturalmente unos días, donde, con la fragua nuevamente al hombro, hice semblanza de algunos relatos del lado de acá y del lado de allá. Eso fue en la Ergástula (vaya nombrecito), de la mano de la concejala Mercedes G. Rojo, que por cierto es prima carnal (dicho sea de paso y a la buena fe) de una rapazas (ahora ya mujeres hechas y derechas) que en la adolescencia fueran amigas en los veranos tórridos, es un decir, de Noceda del Bierzo. Loli o Lola y Bego, se llamaban/se llaman. Vivían en Valladolid y veraneaban en Noceda.  

http://www.diariodeleon.es/noticias/provincia/cuenya-protagoniza-las-nuevas-tardes-en-ergastula_716325.html

Y al día siguiente de cuentear en Astúrica Augusta (la villa de curas, monjas y militares... ah, y mantecadas acaso diseñadas por Gaudí) nos dimos cita en el útero de Gistredo para recitar más poemas y fraseologías. Como el que no quiere la cosa, queriéndola, ya vamos por el Tercer Encuentro Literario. Y lo que te rondará, morena (¿se dice así?). 

Agosto es un mes para pachanguear, saludar a quienes normalmente no vemos (hay muchos y muchas nocedenses exiliados/as por el mundo "alante", incluso en países como Burundi, ¿verdad, Javier Nogaledo?, ahí es nada) y hacerle votos de castidad, perdón, de reverencia y amor, a la virgen de las Chanas (¡qué san Roque no se enfade!), aunque este año se me fue el santo/la santa a los cielos, y casi no me dio tiempo a sentir la fragancia virginal y chanera. Pido disculpas por ello y prometo ser más devoto en próximos años. La virgen de las Chanas quién la sacará, quién la sacará... Pepín el del Cubano y otros cuatro más... Ahorita/ahorinita le enciendo una vela, o mejor un cirio pascual, para expiar mis pecados y mis culpas judeocristianas (en las que ya no creo, por fortuna, amén). 

Pues entre tanto dance y friegue... excursión incluida a Salientes, o sea el confín de los osos y las mil madreñas rojas, el mes de agosto casi llegó a su fin, no sin antes recitar más poemas a los desaparecidos y desaparecidas por causa de los cabrones matarifes. 


El acto tuvo lugar a finales de mes en Ponferrada, donde está ubicada una réplica de la Victoria de Samotracia, a orillas del Sil, mirando hacia el castillo templario. Allí nos reunimos à nouveau un buen puñado de duendes para reivindicar la memoria, la historia reciente, que acuchilló y fusiló a tantos inocentes, a tantas personas. "Memoria de los asesinados"  escribí y leí para la ocasión. 

Todo un año, qué difícil resumir todo, aunque sólo sean unos meses. Me doy cuenta, ya lo sabía, que me quedan muchas cosas en el tintero, que se decía antaño, con lo cual dejo para otro momento los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre. Hasta la próxima. 

sábado, 29 de diciembre de 2012

Todo un año, de enero a junio de 2012

Queda poco para que el 2012 estire la pata. Lo de estirar la pata es una frase visualmente fuerte, con mucha enjundia, que da como "canguelo". La pata la estiraban, lo recuerdo como si fuera hoy, los gochos, luego de darles cuchillazo en período de San Martino, o sea, por este tiempo invernal, nomás, propio para conservar los chorizos, jamones. Aquellas matanzas gorrinas me producían escalofríos, dicho sea de paso y a la buena fe. 

Y la pata la siguen estirando no sólo los cerdos acuchillados, sino las personas, los humanos, demasiado humanos, los años... todo en verdad llega a su fin, incluso este mundo en expansión y corrido al rojo (aunque los mayas no acertaran en el momento de su desenlace). Pero llegará el día en que también el universo estire la pata, ¿o no? Nunca lo sabremos. O eso creo. Pero no nos pongamos estupendos y trascendentales, al menos por ahora, porque un año acaba y otro empezará. Ciclo vital, que se dice. La historia se repite, bueno, hasta que deje de hacerlo. Esperamos, no obstante, que haya nuevo ciclo, renovación. Lo espero. Con buenos deseos, con toda la esperanza puesta en nuevos y emprendedores proyectos. 

En realidad, el 2012, que aún sigue, no ha sido tan malo para uno, antes al contrario, a pesar de la crisis, what crisis? (esto sonó a Supertramp, qué gran banda), la crisis financiera, espiritual, anímica que nos han metido los banqueros de mierda y los tiburones hijos de la chingada entre pecho y espalda. Y ahora, en época de vacas flacas y toros "mochos", que cada cual aguante su cirio. 

Podría decir que este ha sido el año de la fragua, donde se moldean nobles materiales y se forjan sueños e ilusiones. Y es que la fragua ha dado mucho de sí. Y espero que siga dando sus frutos, porque en enero de 2013 es probable que lleve mi fragua a la ciudad roja de Marrakech. Ojalá, inshallah. 

Después volveré sobre este asunto, acaso el meollo del 2012, el hilo conductor (con la temperatura afectiva adecuada, eso sí) que me ha llevado de un lado a otro, con la satisfacción de haber plasmado en un librín tantos años de viajes, impresiones, reflexiones... 
Agradezco mucho, querida A., confidente y cómplice, que estuvieras, que estés ahí, siempre y en todo momento. 
El Douro a su paso por Miranda, Portugal

Comencé este año de 2012 viajando -en estupenda y afectuosa compañía-, siguiendo el curso del Duero. Ay, el Duero, cuán literario y fluido. Este viaje partió de una idea que pudo haberse convertido en un proyecto literario, editorial, pero al final se quedó en nada, o casi nada, porque el viaje por los/las Arribes del Duero, tanto de lado español, como de la orilla portuguesa, no nos lo quitó nadie, por fortuna. Siempre (o eso deseo) nos quedará el ideal de la libertad y del viaje, y puede que algún día recupere la idea/proyecto sobre el Duero, sólo es cuestión de ponerse al tajo, porque todo lo que uno no pueda hacer por sí mismo, difícilmente lo podrán hacer los demás. 


Barca d'Alva-Portugal
Fermoselle, Zamora

No obstante, cuento con el apoyo y afecto de alguien que tuvo a bien acompañarme en este recorrido por la provincia de Zamora (Fermoselle), Salamanca (Aldeadávila de la Ribera...) y la región de Tras-os-Montes (Miranda do Douro) y Freixo de Espada à Cinta y Barca d'Alva entre otros lugares de interés, al menos para los viajeros. Tengo la impresión de que debería volver sobre los pasos de este viaje, incluso de comenzarlo en su origen, "las fuentes del Duero", y rematarlo en Porto (Oporto), ciudad que he visitado en dos ocasiones, y que amerita de una tercera visita, incluso de más visitas, porque uno, si abre bien sus poros del alma, acaba encontrando muchas cosas lindas, muchas miradas sobre una ciudad, sobre el paisanaje, sobre el mundo, en definitiva. El Porto viejo tiene su encanto, en esa su decadencia y descascarillado de sus casas, en las que asoman las ropas tendidas al exterior, pero el Porto, que da al mar, se abre como un sueño... en pos de nuevos horizontes. El mar, ay, hace pensar en el infinito. Espacio literario que enciende la imaginación y nutre nuestros deseos. Pero no es hora ni momento (o sí) de relatar este viaje a orillas del Douro. Tiempo habrá, espero, para darse un buen chapuzón literario en sus aguas. 
                                        Viejo Porto

Enero de 2012 se inició de este modo, tan viajero. Fue también el mes en que contacté por primera vez con Lentxu Rubial, la hija de Ramón, a partir de lo que escribiera uno mismo sobre el primer Lendakari vasco de la etapa preautonómica, aunque originario de Robledo de las Traviesas (El Bierzo), en el Diario de León. Lástima, Lentxu, que ni siquiera pudiéramos vernos este mes de diciembre en Bilbao, con motivo de la presentación de mi fragua (de Furil) en el hogar leonés de la ciudad del Guggen. Bueno, me siento contento con que mis amigos Ana y Javi pudieran quedar contigo recientemente. Qué lindo viaje, a Bilbao. 

A finales de enero, la escritora madrileña Raquel Viejobueno, experta en cafés literarios, decidió presentar en Noceda del Bierzo la antología La noche, en la que tuve a bien participar con un relato precisamente sobre la noche. Eso fue en Las Fontaninas. Y, entre medias, los artistas GavilanesLeón expusieron su obra (en la que también participé con un texto-poema a una de sus obras) en el Campus de Ponferrada. 

Esto dio de sí, a grandes rasgos, el mes de enero. 

Y llegó febrerito el corto, con sus fríos (los imagino, porque ya no me acuerdo) para anunciarnos la terrible noticia de la muerte del cineasta Angelopoulos, uno de los más grandes directores contemporáneos, y sobre el que escribí en este mismo blog y en bembibredigital. 

Y, también, a través de mi estimada ex alumna Orfelina, me enteré de la muerte de Celso, un hombre singular que conociera en uno de esos viajes al interior del Bierzo, en concreto en un viaje hacia Ferradillo, la pequeña Rusia de esta comarca leonesa, donde se refugiaran en tiempos los maquis y los rojos perseguidos por los fachas y matarifes. 

En febrero vinieron los Sidonie a actuar en la Sala la Vaca de Ponferrada, y por supuesto montaron su espectáculo. Mereció la pena escucharlos una vez más en directo. 

Y en este breve y sustancioso mes comencé ciclos de cine en el Ayuntamiento de Castropodame, dedicados a los cineastas bercianos, Beli Folgado (autor de Paisajes interiores y Ancestral Delicatessen) y Chema Sarmiento (director de películas como El Filandón o Los Montes).  

Y el 15 de febrero presenté mi fragua en el club de prensa del Diario de León, con el arropamiento de su director, Pablo Lago, y el escritor y periodista y todoterreno Pedro Trapiello. Allí estuvieron grandes amigos y amigas, paisanos y paisanas, familiares (incluido algún Furil), y aun alumnas de mi taller de escritura del Servicio de Actividades Culturales  de la Universidad de León. Un gran aforo para la presentación de un libro, habida cuenta que a las presentaciones de libros suelen ir cuatro gatos/as, a veces hasta mal contados/as. 
Con Varela y Roberto Arias
                       Nada más comenzar marzo, se desató un fuego impresionante en la Sierra de Gistredo, cuya fumarola llegó a Ponferrada. Un atentado contra la naturaleza, que esperamos no se repita. Los pirómanos y descerebrados siempre dando candela a los montes. Qué desgraciados. Marzo también fue el mes de la presentación de mi fragua en Ponferrada. Me presentaron el gran Miguel A. Varela y Roberto Arias, delegado del Diario de León en Ponferrada. Un acto entrañable. O eso sentí. Por eso adelanté que la fragua ha sido/sigue siendo (ahora la fragua literaria leonesa) el hilo conductor del 2012. Todo girando en torno a la fragua... de Furil. 
Faro de Finisterre
Finisterre

En abril viajé al Finis terrae galego, que se me antoja de una enorme belleza, con sus acantilados y sus playas salvajes, y a Coruña, ciudad por la que siento gran cariño. En esta última ciudad presenté la fragua, en el hogar leonés de la capital de la Torre de Hércules y Riazor. Y aquí estuve arropado por Chero/Celemín, con quien en su día hiciera Tardes y ciclos de cine en Bembibre, además de una guía sobre la villa del Benevivere. Agradezco que en la presentación estuvieran Mar, paisana nocedense, y Ángeles Amor, coordinadora de los cursos de extensión de la Uned en el Campus del Noroeste. 
Con Rafel y Juanma en Casa leonesa en Madrid

Y en este mismo mes volví a presentar la fragua en el café-librería La Maga, de Fuenlabrada, de la mano de Fabi Ballesteros. Gracias, Fabi. Y también hice presentación en el hogar leonés de la capital del Reino. Allí me acompañaron y arroparon el amigo, bloguero y periodista Juanma Colinas ("el plumilla berciano") y el gran Miguel Varela, director del teatro Bergidum, ilustre e ilustrado berciano y amigo con quien comparto aficiones por el teatro (La Zaranda), la música (Kroke), viajes (Portugal, Galicia...), lecturas... Y allí estuvieron amigos y amigas del Bierzo, incluso mis sobrinos Andy y Finín. Gracias Ra, Blanca, Óscar, Nina, Pepín, Pablo, y gracias a ti, por estar y ser.

Me alegró volver a ver y saludar a José Luis Moreno-Ruiz, después de tantos años, que tuvo la amabilidad de acercarse al hogar leonés de Madrid. Una breve pero agradable conversación. A ver si coincidimos en otra ocasión, estimado José Luis, ya sea en Madrid, Ponferrada, etc. 

En mayo, el amigo y poeta Abel Aparicio presentó en Ponferrada la antología Esto no rima, poesía reivindicativa de altos vuelos. El acto se hizo en la sala Dosmilvacas, de Reme. 

Hollande subió al poder en la república francesa. Murió el grandísimo escritor mexicano Carlos Fuentes, al que le rendí homenaje con un texto en Diario de León. La Zaranda (tal vez la mejor compañía de teatro de este país, ¿verdad, Miguel?) estrenó La patria de los espectros en el Bergidum de Ponferrada. Y volví a las andadas con la fragua, llevándola al hombro como un afilador de tijeras, hasta Pucela, ciudad en la que me presentó el gran periodista Aniano Gago, con la presencia en el auditorio, entre otros amigos y amigas nocedenses, del periodista y experto en política Pedro Vicente. Un viaje hermoso hasta Valladolid, en deliciosa compañía, con parada en la monumental y pictórica, musical y librera villa de Urueña. 

Comencé junio estrenando La pesadilla de un seductor en Ponferrada, una obra de teatro que tuve a bien escribir para mis alumnos/as de la Uni de la Experiencia. 
Y disfruté del tiempo, el clima y el amor. En junio José Luis Presa presentó La luz de mi noche en su tierra, Benavides de Órbigo. Un hermosísimo libro de fotografía nocturna, que contó con algunos textos poéticos, y en el que tuve la satisfacción de participar. También de acudir, con el radiofonista y escritor Nicanor García Ordiz, a la presentación de esta obra en Benavides.

Y en el mes de junio tocó nueva presentación de la fragua en Bembibre, en la casa de las culturas. Aquí me la presentaron el escritor argentino-berciano Eduardo Keudell, amigo y prologuista del libro, y Jovino Andina, amigo y prócer de la cultura berciana. 

En este caso, tiene que haber segundas partes porque me quedan pendientes los seis meses que van de julio a diciembre. 

miércoles, 26 de diciembre de 2012

La fragua literaria leonesa: Valentín Carrera

http://www.diariodeleon.es/noticias/cultura/bloguero-y-periodista-ahora-son-sinonimos-_754781.html

«Bloguero y periodista ahora son sinónimos»

El escritor, cineasta y periodista Valentín Carrera, autor de libros como ‘Viaje del Vierzo’ y ‘Viaje interior por la provincia del Bierzo’, ha lanzado recientemente un novedoso proyecto editorial ‘on line’ llamado eBooksBierzo.

Aventurero, viajero a los confines de la tierra, cineasta, escritor, periodista, filósofo, «un sabio renacentista de nuestro tiempo», como lo definiera un prócer de la cultura leonesa. Así es Valentín Carrera.
Como buen viajero por el ancho mundo, sus documentales, series de televisión y sus libros suelen estar relacionados con el viaje como estructura narrativa.
Inolvidable aquel Viaje del Vierzo, en el que Carrera y el fotógrafo Anxo Cabada recorrían, cual gauchos a lomos de caballos, el Bierzo, incluso ese territorio menos conocido y por supuesto más agreste, como es la serranía de Gistredo y el valle de Noceda, donde los viajeros fueron hospedados en casa de Pepe el Herrero, el insigne propietario de La fragua de Furil. Un viaje que nos dejó una profunda huella, pues este libro ayuda a entender y recorrer con entusiasmo esta comarca leonesa.
«El verdadero viaje –según Carrera-, es una profunda revolución personal, un aprendizaje, un despertar de los sentidos y de las potencias del alma».
Transcurridos veinte años de su primer Viaje del Vierzo, el autor del manifiesto ecológico, Robinson en el Bierzo, nos obsequió con otro apasionante recorrido por el Bierzo actual, Viaje interior por la provincia del Bierzo, «un poliedro inacabable, una crónica íntima del Bierzo, escrita por alguien que se siente más berciano cuanto más lejos está de su tierra, porque el Bierzo lo ha acompañado a lo largo de toda su vida allá donde ha ido, incluso a los lugares más remotos».
Se trata de un viaje literario o mirada interior -en realidad son muchos viajes y miradas-, realizado en verano de 2008 en treinta jornadas. «De lo local a lo global, y de lo global a lo local (glocal), una radiografía humana, ecológica, paisajística y cultural del Bierzo en el siglo XXI», donde nos vamos encontrando con nuestro pasado y también con nuestro presente: jipis, ermitaños, mineros, monjas, poetas, políticos, filósofos, pintores, osos, urogallos, entre otros. Un libro ilustrado con imágenes de Anxo Cabada, uno de sus compañeros de viaje. «Los propósitos de esta obra -asegura el autor en el prólogo-, son tres, la incesante búsqueda de mis raíces, el reconocimiento de quienes fueron mis maestros, y la voluntad de dar ejemplo a mis hijas». Con este libro «he pretendido desmontar estereotipos históricos, religiosos, sexuales, tan arraigados y cargados de mentiras».
El autor berciano nos lleva de la mano desde la Tebaida del Oza hasta la Ciudad de los Muertos, en El Cairo, y nos da cuenta de los cambios que ha vivido el Bierzo durante estos últimos veinte años, «si bien hay cosas que siguen igual, en un estado lamentable de abandono, como la herrería de Compludo», aclara Carrera, quien realiza un repaso por sus fiestas y tradiciones, la minería y el vino, el último barquero del Sil, las fosas comunes, su infancia y adolescencia en «la ciudad de la niebla», algunas historias de brujas y ovnis, sus andanzas por la Campa de Santiago, el valle del Catoute y el Alto Sil, donde canta el urogallo y campa el oso, o el recuerdo afectuoso que tiene para el gran escritor Antonio Pereira.
Un libro, con una estética muy atractiva, que resulta ameno y reflexivo en su lectura. Y un autor, Valentín Carrera, que no deja indiferente a nadie.
En la actualidad, impulsa eBooksBierzo, un proyecto editorial on line, novedoso, que ya dispone de diez títulos publicados en ebook (de autores como Consuelo Álvarez de Toledo, Arturo Suárez-Bárcena, Aniceto Núñez, Castaño Posse, entre otros), y que aspira a ir formando un verdadero catálogo digital de temas y autores bercianos, disponible en la red 24 horas/365 días desde cualquier lugar del mundo. «Ahora ser bloguero y periodista son sinónimos. Y el que no quiera, pues que siga con la máquina de escribir Hispano Olivetti y todos tan contentos. Yo también sigo escribiendo muchas cosas a mano y otras se las dicto al iPad y las convierte en texto. El AVE es compatible con el caballo y hay tribus que siguen viviendo en el Neolítico. Cabemos todos».
eBooksBierzo cuenta con un Consejo Editorial formado por escritores, profesores y periodistas y una tienda on line propia, pero sus ebooks se venden ya en Amazon, La Casa del Libro, Meubook y otras plataformas. «No da un duro, pero me procura muchas alegrías; y antes de cien años, todos calvos y en ebook», resume Carrera con un optimismo a prueba de crisis.

«Nada humano me es ajeno»




—Qué libro no dejarías de leer o leerías por segunda vez?
El Quijote. Lo leí con un impagable profesor de literatura, don Benito Varela; y lo sigo leyendo. Me divierte y me hace pensar.
—Un personaje imprescindible en la literatura (o en la vida).
—Como decía el personaje de Amanece que no es poco: «¡Alcalde, todos somos contingentes, solo tú eres necesario!». Si me apuras mucho, Sócrates.
—Un autor o autora insoportable (o un libro insoportable).
—Cuando un autor no me interesa, lo aparto sin remordimiento. El tiempo es escaso y la mies valiosa mucha.
—Un rasgo que defina tu personalidad.
—Nada humano me es ajeno: me esfuerzo por comprender la vida, las personas…
—¿Qué cualidad prefieres en una persona?
—Que sepa escuchar.
—¿Qué opinión te merece la política actual? ¿Y la sociedad?
—Concibo la política como una actividad muy noble y necesaria, a la manera de Cicerón o Marco Aurelio. No comparto el discurso reaccionario de que todos los políticos son iguales y corruptos. La ‘crisis’ es una simple estafa de los banqueros a la gente sencilla.
—¿Qué es lo que más te divierte en esta vida?
—El sexo, pero como solo puedo practicarlo tres o cuatro veces al día, el resto del tiempo escribo.
—¿Por qué escribes?
—Por lo que ya dije.
—¿Crees que las redes sociales, Facebook o Twitter, sirven para ejercitar tu estilo literario?
El pobrecito hablador de Larra hoy sería un blog. Es casi imposible ser periodista o escritor sin estar en la Red. Requiere un aprendizaje de técnicas y estilo: ir al grano, ser sintético, ameno, claro. RecomiendoEscribir para Internet, de Silvia Cobo.
—¿Cuáles son tus fuentes literarias a la hora de escribir?
—Cervantes, Borges y toda la literatura fantástica: Cunqueiro, Conrad, Stevenson, Calvino, Poe, el Ferlosio de Alfanhuí…, Valle-Inclán. En periodismo, Truman Capote, Reverte, Kapucinsky. Y en El Bierzo: Gil y Carrasco, Carnicer y Mestre.
—¿Escribes o sigues algún blog porque te parezca una herramienta literaria?
—Monitorizo decenas de blogs y redes. Dedico 4 o 5 horas diarias a mi trabajo como periodista. La mitad del tiempo la ocupo en ‘escuchar’ lo que la Red dice y eso alimenta mis blogs.
—Una frase que resuma tu modo de entender el mundo.
¡Siempre aprendiendo! Y cuando muera, que pongan en el epitafio: «Murió sin llegar a ver la República Independiente del Bierzo».

martes, 25 de diciembre de 2012

Al poeta Carlos Órdenes Pincheira

Un gran descubrimiento, Carlos Órdenes Pincheira, como poeta y como ser humano. No tengo el gusto de conocerlo en persona, aunque sí a través de su obra y de correos electrónicos y facebook. 

La primera vez que oí hablar de él fue a Raquel Viejobueno, poeta y narradora madrileña con quien he tenido el placer de compartir alguna que otra velada literaria. Raquel acaba de comunicarme que le han concedido el primer Premio de la Casa Regional de Castilla y León en Toledo por un relato, cuyo título es Partisano, sobre la Guerra Civil española. Enhorabuena, Raquel, por este magnífico regalo de Navidad.http://www.raquelviejobuenorodriguez.com/inicio.html
http://www.uncafeconliteratos.es/inicio.html

Agradezco, estimada Raquel, que me hablaras del poeta chileno Carlos Órdenes, pues ahora hemos entrado en contacto, y eso me entusiasma, máxime porque se trata de un gran poeta, que ha tenido la gentileza de incluirme en http://poesiadetodoslostiempos.blogspot.com.es/ y además ha sido muy amable y cercano conmigo, dedicándome bellas y cariñosas palabras. 

Y gracias a ti, Carlos, por ser tan generoso con mis textos. 
Salud, maestro, y larga vida. 

http://unionhispanoamericana.ning.com/profile/CarlosOrdenesPincheiraaquequ

http://antologiavirtualpoetasdelmundo.blogspot.com.es/2012/12/carlos-ordenes-pincheira-poeta-chileno.html

lunes, 24 de diciembre de 2012

El realismo cinematográfico de Berlanga y Bardem




La influencia del neorrealismo italiano se hace evidente y definitiva en dos grandes autores de nuestra filmografía. Se trata de Berlanga y Bardem, quienes deciden emprender una aventura casi en solitario en los años 50 y aun en los 60 (a excepción de Nieves Conde, que realiza la notable Surcos, o bien Marco Ferreri, quien curiosamente llega a España desde Italia para realizar emblemáticas y memorables pelis como El Pisito (1959) o El cochecito (1960)) en el marco de un cine acartonado y en algunos casos hecho con niños y niñas prodigio como Joselito, Marisol o Rocío Durcal. 

En esta maravillosa y arriesgada aventura se embarcan dos insignes capitanes  de la tripulación cinematográfica española como son Juan Antonio Bardem y Luis García Berlanga, ambos graduados en el Instituto de Investigaciones y Experiencias Cinematográficas de Madrid, el que luego sería, en 1962, Escuela Oficial de Cine, la primera y única del país. Pertenecientes a la primera promoción, Bardem y Berlanga debutan en el cine con la codirección de Esa pareja feliz (1951), una comedia con un toque dramático, “comedia del desarrollismo” o comedia costumbrista, que pone en evidencia las precarias condiciones, incluidas las del trabajo, en las que se vivía en la España de esa época de posguerra “incivil”, lo cual incomodó a la industria cinematográfica, de ahí que se le negaran ayudas estatales para su realización y que se estrenará en 1953, dos años después haberse filmado. El argumento nos cuenta cómo un humilde matrimonio madrileño gana un concurso, pero como contrapartida a Juan (interpretado por el gran Fernán Gómez) lo despiden de su trabajo y encima es timado.
Muerte de un ciclista

La participación conjunta de Bardem y Berlanga, los cuales le hicieron varias verónicas y chicuelinas a la censura franquista, continuaría en Bienvenido Mister Marshall (1952), una película dirigida por Berlanga, pero en la que Bardem sería coguionista de la misma, y Miguel Mihura intervendría en la parte de los diálogos. Una crítica y sátira a la España del momento.  

Bardem, por su parte y en solitario, dirige Muerte de un ciclista (1955, Premio de la Crítica internacional en el Festival de Cannes) y Calle Mayor (1956, Premio de la Crítica en el Festival de Venecia, aunque al final no se llevara el León de Oro por declararse desierto).
Ambas pelis tuvieron serios problemas con la censura del momento. De “gravemente peligrosa” se llegó a calificar la hispano-italiana Muerte de un ciclista.

Durante el rodaje de Calle Mayor, que toma su inspiración de La señorita de Trévelez, de Arniches, su director Bardem, militante del Partido Comunista, fue a parar a la cárcel por evidentes implicaciones políticas. Calle Mayor está considerada como una de las 50 mejores películas del cine europeo, y fue nominada a los Óscar en su día, aunque no llegara a obtener el prestigioso premio.  

Juan Antonio Bardem fue hijo, padre y abuelo de cómicos: la saga Bardem, de la que forma parte Pilar y el camaleónico actorJavier, entre otros.

Berlanga, tal vez el mejor director español de todos los tiempos, si exceptuamos a Buñuel, realiza, aparte de la mencionada Bienvenido Mister Marshall, otras como Calabuch (1956),  la arriesgada Los jueves, milagro (1957), Plácido (nominada al Óscar a la mejor película de habla no inglesa en 1961) o El verdugo (1963), una auténtica obra maestra del cine, que trata con fino humor la pena de muerte.
El verdugo

Huelga decir que una buena parte de las películas dirigidas por Luis García Berlanga cuentan con el toque mágico, a veces surrealista, de Azcona, uno de los más grandes guionistas de nuestra historia cinematográfica. 

Un capítulo aparte se merece el grandísimo Luis Buñuel, cuya obra está rodada fundamentalmente en México y Francia, aunque de un modo ocasional vuelve a España para filmar la magistral Viridiana (1961) y Tristana (1970), basada ésta última en una novela homónima de Galdós, y protagonizada por la bella Deneuve y el carismático Fernando Rey. Ni que decir tiene que ambas pelis causaron cierto revuelo en el contexto represivo y censor de la época. 

El neorrealismo italiano y las llamadas Conversaciones de Salamanca (1955) dieron un nuevo impulso al cine español, que se reveló, en manos de Berlanga y Bardem (incluso de Martín Patino, que fue el organizador de estas Jornadas dedicadas al cine en su ciudad natal y conocido por su espléndida y cruda Queridísimos verdugos) contra el sistema imperante, abogando por un cine comprometido, con una estética realista.

Famoso y demoledor es el manifiesto, salido de estas conversaciones, en el que se aclara que "El cine español actual es políticamente ineficaz, socialmente falso, intelectualmente ínfimo, estéticamente nulo e industrialmente raquítico". 

Asimismo, tanto Martín Patino como Bardem señalan que"El cine español vive aislado; aislado no sólo del mundo, sino de nuestra propia realidad. Cuando el cine de todos los países concentra su interés en los problemas que la realidad plantea cada día, sirviendo así a una esencial misión de testimonio, el cine español continúa cultivando tópicos conocidos (…). El problema del cine español es que (…) no es ese testigo que nuestro tiempo exige a toda creación humana".

Entre los artífices de estas jornadas de análisis y reflexión dedicadas al cine español y su futuro, aparte de los ya mencionados, también encontramos a Muñoz Suay, que fue guionista, director y productor de cine.
Ejerció como ayudante de dirección en Bienvenido, Mister Marshall, y como productor de Viridiana.

La importancia del neorrealismo (Ferreri, aparte de los De Sica, Fellini, Rosselini... es un buen ejemplo), las Conversaciones de Salamanca y las pelis de Bardem y Berlanga dieron un nuevo y sustancioso rumbo a nuestro cine. 

domingo, 23 de diciembre de 2012

A Ledo Ivo

Con Ledo Ivo en León, Noviembre de 2011
La primera vez que oí hablar de Ledo Ivo fue al gran trovador y poeta Juan Carlos Mestre, amigo y paisano,   capaz de hipnotizar, embelesar a todo un auditorio con su voz mágica y todopoderosa y sus poemas hechos con las entrañas de una lírica que toca las estrellas y a las personas, a partes iguales. 

Muy grande, el villafranquino y universal Juan Carlos, acaso el mejor poeta-recitador de cuantos haya visto y escuchado en nuestro país. Todo un lujo para nuestra tierra, y que se merece todas las glorias y laureles. 

Pues sí, fue Mestre, el autor de La bicicleta del panadero y del sublime poema Cavalo Morto, quien nos acercó a Ledo Ivo, otro enorme poeta, que tanto influjo causara en el autor de La tumba de Keats. 

El escritor brasileiro Ledo Ivo nos ha dicho adiós en Sevilla, aunque su poesía, su obra permanecerá más allá de nuestro olvido. 

Tuve la suerte, al menos, de verlo el pasado año, casi por estas fechas, en León, con motivo de los premios Leteo, que concede el homónimo club cultural presidido por el amigo Rafa Saravia. 

Allí, aquí, en la capital leonesa, estuvo Ledo Ivo, de la mano de Saravia y en compañía de sus amigos Mestre y Gamoneda, y todos y todas aquellos y aquellas que decidimos estar, arropando el acto, empapándonos con el saber del maestro Ivo, cuya poesía se me antoja excelsa, tanto es así que su poema Mi patria, recogido en La aldea de sal (con traducción al castellano de la poeta Guadalupe Grande y el propio Mestre) me sirvió como inspiración esencial, definitiva, para componer Mi matria.
http://cuenya.blogspot.com.es/2011/11/modo-de-plagio-acaso-creativo-o.html
Qué pena, que también los grandes tengan que morirse.   

El mejor modo de pasar la Nochebuena



"El mejor modo de pasar la nochebuena es estar solo en una bella ciudad europea que antes no conocíamos.

Observar a la gente feliz, o que lo parece, y no formar parte de su alegría, estar fuera.

Luego cenar pronto, antes de los fastos creyentes, en cualquier bar.

Pasear por las calles nocturnas, cada vez más vacías, llegar al hotel en la medianoche.

Escuchar a Bach, tal vez ojear un libro de textos breves.

Sentir una honda, imprescindible, algo ruda libertad.

Acostarse no muy tarde, tan lejos de todo: sentir ese placer misterioso".

LUPICINIO FÍLFEZ, ensayista y poeta.

El texto de Lupicinio Fílfez, o sea de César Gavela, me ha despertado estas palabras, a propósito de la Nochebuena. 

El mejor modo de pasar la noche buena, querido César, es estar con una bella y afectuosa compañía. Ser feliz observando a la gente feliz que uno quiere. Cenar pronto o tarde, eso no importa, pasear o bien acurrucarse al amor de la lumbre, escuchar música vibrante y placentera: el oratorio de Navidad de Juan Sebastian Bach, está muy bien, pero podrían ser también otras músicas posibles, leer algo o nada, escribir un aforismo, una greguería, incluso un micro, o nada, sentir, eso sí, sentirlo todo de todas las maneras, sentir la libertad, algo imprescindible, volar aunque sea en sueño, acostarse con las palabras acariciadoras, siempre en dulce compañía, sentirlo todo... el placer inmenso de estar vivo, gozar de salud y tener la temperatura afectiva adecuada, al lado de un brasero, que procure asimismo la temperatura ambiental necesaria, mientras afuera nieva con esplendor navideño. Y para rematar la velada de la nochebuena, lo mejor, lo más saludable es dormir sereno, en paz, con la placidez de los ángeles (o las ángelas) y soñar, eso sí, con mundos hermosos y posibles.

Gracias, amor, por estar ahí.

miércoles, 19 de diciembre de 2012

Flores de otoño, por Manuela Bodas


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escrito
Con Tomás Néstor en Veguellina
Os dejo este texto,  Manuela Bodas en el Faro de Astorga a propósito de Narradores en Otoño en Veguellina de Órbigo. Muy generosa con nosotros, Manuela, al menos conmigo. El pasado mes de noviembre le tocó a este menda, y ahora es el turno de Noemí Sabugal, cuya intervención será el próximo viernes 21 de diciembre. Suerte, Noemí. 

              Este otoño, en la Biblioteca Municipal del Ayuntamiento de Villarejo de Órbigo, sita en el I.E.S “Río Órbigo” de Veguellina de Órbigo, veremos crecer, hasta convertirse en flores, las palabras de dos grandes narradores del panorama nacional. Este otoño que desnuda la naturaleza en pro del descanso verde, escucharemos en Veguellina de Órbigo, gracias al trabajo y dedicación de nuestra querida bibliotecaria Helena García Fraile, las voces de dos jóvenes narradores que convertirán en flores, las hojas secas que alfombran las praderas. También gracias al empeño de Tomás Néstor Martínez Álvarez, nuestro galardonado con el “Gerardo Diego de Investigación Literaria”  el pasado año, podremos palpar el movimiento de la creatividad de Manuel Cuenya y de Noemí G. Sabugal. 
                    Manuel Cuenya estuvo el pasado viernes, acercándonos sus libros, calentamos las ganas en su “Fragua de Furil”. Manuel Cuenya, viajero del mundo y de la vida, es un hombre cercano, de fácil palabra, con el aditivo de la humildad en sus formas y en su manera de andar por la creatividad. Es de obligado reconocimiento, que un escritor de larga andadura y de calado emotivo en su literatura, diga con toda la humildad del mundo que nada se inventa, que todo está inventado, que todo, o casi todo, se ha dicho y escrito varias veces; para los que aún estamos en el lado de los descubrimientos, esta forma de hablar, nos acerca y nos mueve a seguir en el mundo de las letras, nos incita a seguir leyendo para seguir aprendiendo. 
                    La siguiente flor de este otoño, llegará el 21 de diciembre, para exponernos su manera de escribir, para explicarnos sus cuitas ante el gran reto que supone sentarte ante un folio en blanco. Esta flor que cerrará el ciclo del  2012 de “En Otoño Narradores” de Veguellina de Órbigo, será Noemí G. Sabugal, que ha arrasado con su ópera prima titulada “El asesinato de Sócrates”. Esperamos su intervención en la Biblioteca Municipal del I.E.S “Río Órbigo” con ganas y expectación, deseosos de conocer a esta joven repetidamente galardonada. 
                    Agradecer a Helena, Tomás Néstor y a todos los que hacen posible este encuentro con la ficción y la literatura en vivo y en directo, su dedicación, invocando a los hados de las letras, que los signos futuros, estén en posición de seguir con este encuentro tan importante,  entre la realidad y los sueños, máxime en estos tiempos en los que si podemos centrarnos en la lectura, estaremos aislados de los negativos datos bancarios, nos olvidaremos de los malos pasos que muchos políticos, han dado para desviar nuestros dineros hacia sus insensibles bolsillos. Leyendo, se cumplirán nuestras expectativas de futuro, incluso aprenderemos mejores técnicas de convivencia y solidaridad, en definitiva, leer es curativo y además gratis, si utilizamos nuestras bibliotecas.
                    ¡Que la lectura nos acompañe siempre! 

                       

                       

martes, 18 de diciembre de 2012

La fragua literaria leonesa: Ángel Fierro

Os dejo este enlace sobre el escritor leonés Ángel Fierro: http://www.diariodeleon.es/noticias/cultura/mi-poesia-tiene-vocacion-existencial-_752575.html


Ángel Fierro por Higinio del Valle

Mi poesía tiene vocación existencial”


El poeta, narrador e investigador montañés, autor de novelas como la última de su nómina, ‘El contador de vientos’, y fundador de las legendarias revistas ‘Claraboya’ y ‘Picogallo’, publicará en 2013 ‘Río Curueño. El fluir literario’

Originario de Cármenes, Ángel Fierro pertenece a la generación de la poesía comprometida leonesa, y aunque su obra poética no es muy extensa, sí lo es su obra en general. Esencialmente poeta, Fierro es además narrador e investigador, que ha cultivado con esmero la etnografía, la historia y la música de su comarca, Los Argüellos, donde  está ambientada su novela, El contador de vientos.
   La suma de estos intereses hace que su bibliografía y sus grabaciones discográficas, que incluyen estudios musicológicos y partituras de la montaña leonesa, se acerquen a la cincuentena de títulos.
   Fierro es, junto a Mateo Díez, José Antonio Llamas y el recientemente fallecido Agustín Delgado, miembro fundador y responsable de las revistas Claraboya y Picogallo. “En el caso de Claraboya -aclara Fierro- la irrupción de la revista abrió debate en el panorama poético español de la segunda mitad del siglo XX. Para nosotros fue también órgano de amistad, escuela de aprendizaje y tribuna desde donde elaborar nuestra visión de la poesía, siempre que su escritura tuviese una brizna de humanidad”. “Por lo que respecta a Picogallo, su objetivo fue distinto. Se trató de un balcón literario abierto desde la Asociación Cultural de Cármenes, donde un grupo de vecinos ensayamos el acercamiento de la cultura al mundo rural; una postura ética de libertad y respeto a lo diferente, frente al sectarismo de ´ismos´ y tribus, que enmascaran sus miserias bajo el adjetivo de lo social”.
   De Agustín Delgado dice, con afecto,  que fue “uno de los fundadores e ideólogo del grupo en su etapa inicial, que nos ha precedido a todos en el más allá y que merecería un homenaje”.
   Como poeta, Fierro forma parte de antologías como León. Una mirada literaria, que editó la Fundación Hullera Vasco-leonesa en 2006, donde se encuentran las claves de su obra poética. “Mi poesía tiene vocación existencial –añade - en cuanto trata temas como el amor, el tiempo, la muerte, el eterno retorno, lo substantivo del hombre. Un lirismo atemperado por la razón”.
   En lo que respecta a su amplia faceta como etnógrafo cabe destacar títulos como  Romancero de Arbolio o Aromas y memorias. Las juderías de León. Y en lo referente a su labor de recopilación de la música tradicional, convendría mencionar sus cantos del alto Curueño, del alto Torío o el alto Bernesga. Su pasión por la música le ha llevado a transcribir y editar, mediante dos hermosos libros y nueve grabaciones sonoras, cerca de 500 tonadas del folclore tradicional de su tierra, Los Argüellos (Arbolio).  “Ha sido un gozoso trabajo de recuperación y recreación musical y literaria, poco reconocido hasta la fecha. Después de haber coronado este enorme trabajo, estamos en condiciones de lanzar un reto a todas las comarcas leonesas: que cada río aguante su agua”.
   Arbolio, que da título a una revista editada por la Asociación Cultural  Los duendes de Tolibia, y en cuyo consejo editorial figura Fierro, es nombre que aparece con frecuencia en toda su obra, y se convierte en el espacio legendario donde se desarrolla El contador de vientos, que obtuvo el III premio de Novela corta “Tierras de León”.
   Escrita como si fuera un poemario en prosa, esta novela nos hace recordar, por un lado, El nombre de la rosa, de Eco, y por otro, El perfume, de Süskind, pues nos adentra en un sugerente mundo de aromas y sonidos, con el viento (y la música) como privilegiado protagonista. Aunque entre los personajes principales -se trata de obra coral-, se encuentran también un herrero, como símbolo del saber ancestral, y un monje, que ya viejo recuerda su viaje iniciático, desde su monasterio cisterciense, en compañía de un trovador occitano.  “El contador de vientos tiene algunos préstamos de otros autores  –según Fierro-. Creo que esto es inevitable. Su ambientación podría tener concomitancias con el Merlín y familia, de Cunqueiro.  De Süskind rescato la búsqueda del mundo de los aromas, y las prácticas necesarias para apresarlos”.
   Con esta novela, forjada en una fragua poética,  el autor nos sumerge en paisajes, tradiciones, formas de vida y un modo de hablar propio del antiguo Reino de León. “Mi intención fue tejer un crisol con todas las bellezas de la creación humana en la etapa crucial del siglo XIV: el nacimiento de la polifonía y el valor de los cancioneros medievales (provenzal, galaico y castellano). También, el dilema que se presenta a cada hombre: obediencia o libertad. Y, finalmente, un homenaje al territorio de Los Argüellos, a su lenguaje coloquial y su ancestral sistema de vida.  Su redacción fue para mí un ejercicio poético, casi mágico, frente a la desnudez del realismo actual”.
   Ahora, está trabajando en varios frentes. La editorial sevillana Isla de Sístola le publicará en breve un extenso poemario, El andamiaje de los sueños, con motivos mitológicos, e ilustrado con dibujos de la escultora Esperanza d´Ors. “Creo que será mi testamento poético, e incluso vital. Las ilustraciones de Esperanza harán de este volumen una pequeña obra de arte”. Por otra parte, en la próxima primavera verá la luz Río Curueño. El fluir legendario, que se inscribe, según el poeta, en su intención de recuperar las tradiciones orales de la montaña central leonesa, a cuyo objetivo ha dedicado tantos esfuerzos.

Mi aldea es el mundo


-¿Qué libro no dejarías de leer o leerías por segunda vez?
 
   -La pregunta no es difícil, pero lo es mucho la respuesta, por cuanto implica la necesidad de elegir.
   Mis libros de referencia son múltiples y no quisiera señalar ninguno en concreto, pero estoy releyendo La saga fuga de J.B. de Torrente y la Suite francesa de Némiroswky.
   Siempre regreso a los clásicos y releo con placer los libros de mis amigos los escritores leoneses. Si tengo obligatoriamente que señalar algo, me inclinaría por Borges, la obra poética completa de Paul Celan y los primeros libros de la Biblia.

-Un personaje imprescindible en la literatura (o en la vida).
 
  -Son muchísimos los personajes que admiro y respeto; pero la elección de sus nombres precisaría de explicaciones y matizaciones bastante prolijas (Cervantes, Dante, Leonardo da Vinci, Einstein, Jesucristo...).

-Un autor  o autora insoportable (o un libro insoportable).
 
  -Son muchos. Todos los que se ocupan de lo que no conocen o lo hacen con pedantería y afán de lucimiento o proselitismo. Quizás solo serán salvables para la posteridad un porcentaje ínfimo de las obras que se publican.
  La sobreabundancia de publicaciones constituye un enorme esfuerzo de dispersión para estar al día. A veces son un insulto a la inteligencia y, en último caso, castigan de forma inmisericorde a nuestra depauperada masa forestal.
   Pido perdón por no señalar con el dedo a ningún colega de la escritura.

         -Un rasgo que defina tu personalidad.
  
-Soy un poco perezoso en el autoanálisis. Diría que soy trabajador, serio, metódico y equilibrado, bastante intransigente con la ignorancia y la estupidez humanas.
Como es natural, acepto todos los defectos que ven en mí cuantos me conocen. 

         -¿Qué cualidad prefieres en una persona?
  
-Honradez y trabajo, un poco de inteligencia y sensibilidad (Casi nada)
     -¿Qué opinión te merece la política actual? ¿Y la sociedad?

  -No me gusta hablar de política: está monopolizada por muchos en su provecho.
     La mayoría de profesionales de este menester no han leído y no practican los preceptos de Aristóteles. Coincido con muchos en que ´nuestra´ clase política es un verdadero problema para la sociedad. Las encuestas sitúan a los políticos como tercer problema, después de la situación económica y el paro. No reparan en que estos dos últimos son consecuencia de los malos políticos, a quienes no se exige conocimientos adecuados a su función, y acceden a sus cargos por el solo mérito de pertenecer al partido que les ampara. La regla tiene, naturalmente, honrosas excepciones.
   La sociedad actual está – y recojo el diagnóstico de los pensadores más lúcidos – realmente enferma. Es penoso observar cómo el fin justifica los medios, se discute el propio concepto del mérito, se considera la riqueza y posición social como el bien absoluto, se acalla a la discrepancia.
  La situación es una consecuencia de lo que los sociólogos llaman ´La condición humana´. Su ansia desmesurada de poder y riqueza, su insensibilidad ante el sufrimiento ajeno, el hedonismo, la ausencia de valores. La justicia ha emigrado, la corrupción campea por doquier. ¿Cómo pensar que una sociedad  basada en estos parámetros de ruindad puede responder a las aspiraciones de nuestra especie?

         -¿Qué es lo que más te divierte en esta vida?

  -Las ocupaciones racionales (pensar, hablar, comunicarme, todo lo que hace referencia a la cultura, el arte, la investigación).
  Cosas sencillas: una partida de mus con los amigos, asistir a un concierto, acompañar a mi nieto al campeonato de futbol en que participa, escuchar los chistes de Manuel Martín, tomar los vinos con mi mujer, reunir a mis hijos ante una barbacoa, salir al monte...

-¿Por qué escribes?

-Se trata de ¿una necesidad espiritual?  A través de la escritura desarrollo el propio perfeccionamiento, mantengo la tensión vital y doy fe de mi forma de entender el mundo. A veces me ocupo en salvar para la posteridad los patrimonios olvidados del mundo rural, que conocí en mi infancia. Hablo de amor, de vida, del eterno retorno. Quiero acercarme a la belleza y la verdad.
De todos modos, como dijo Borges, yo no estoy orgulloso de lo que he escrito, sino de lo que he leído.

-¿Crees que las redes sociales, facebook o twitter, sirven para ejercitar tu  estilo literario?

  -En absoluto. Nunca me ha interesado compartir mis asuntos en los patios de vecindad. Con las debidas excepciones estos foros están llenos de mediocridad, exhibicionismo, información no contrastada y en ocasiones mala fe, donde se ventilan todo tipo de trapos sucios.
            No los utilizaría nunca para mi trabajo de creación, ni para ningún otro objetivo, como no fuera el simple entretenimiento. Pero no tengo tiempo para eso.
           Mi postura no se basa en el desprecio por las nuevas tecnologías: la escritura que me importa es la que hacen los buenos escritores; mi fuente de innovación no es la que aportan las redes sociales, sino la de los ingenieros.
           Como resumen, no soy proclive a interesarme por dichas redes.

-¿Cuáles son tus fuentes literarias a la hora de escribir?
          
-Mis fuentes son muy variadas, pues mantengo una gran diversidad de intereses. Me inspiran todas las obras de la creación humana: literatura, música, pintura, fotografía, escultura, historia e investigación... Como resumen, 'nada de lo humano me es ajeno'

-¿Escribes o sigues algún blog con entusiasmo porque te parezca una herramienta literaria?

 -No. Ya lo he contestado antes. Mis herramientas son las obras de los grandes creadores, mi trabajo y mi propia inspiración.

-Una frase que resuma tu modo de entender el mundo.

    -Anotaría tres frases, si se me permite:
          “Mi aldea es el mundo” (Verso de mi poema Un borrador de nieve)
          “Después de amar es nunca”.  (Verso de mi poema Después de amar, del libro El andamiaje de los sueños.
          Y finalmente: “El principio fundamental de la vida es la libertad” (Lo dice textualmente Vasili Grossman en su novela Vida y destino).