Vistas de página en total

martes, 14 de octubre de 2025

Rodrigo Martínez y Sofía Miguélez, músicos excepcionales

 


Recientemente, he podido ver en concierto a Rodrigo Martínez y Sofía Miguélez en La Térmica cultural de Ponferrada y me ha parecido extraordinario, lo cual que no me ha pillado por sorpresa porque ya conocía al menos a Rodrigo -lo conozco desde hace años, cuando conformaba el grupo Tarna con Diego Gutiérrez https://cuenya.blogspot.com/2015/09/musica-en-otono-en-el-bergidum.html-, y sabía, sé, de su talento enorme como músico y multi-instrumentista (se le dan todos los instrumentos, y además se le dan bien). Por lo demás, Rodrigo tiene un oído muy fino, siendo capaz de reconocer por la voz a alguien, como me dijera en una ocasión, "aunque no reconociera tu rostro, sí reconozco tu voz". Un fenómeno con una memoria sonora increíble. 

Aparte de un gran músico, uno de los mejores sin duda de la música tradicional leonesa, es buen tipo, alegre, magnífico conversador, cinéfilo (le gusta como a este menda el cine del sueco Bergman, qué cosas) y ahora es casi berciano de Albares de la Ribera https://cuenya.blogspot.com/2013/05/httpwww.html, que es la tierra, como ya he dicho en alguna ocasión, del padre de mi madre, y la tierra donde nacieran a dos buenos cineastas y amigos como Chema Sarmiento (memorables su Filandón y Los Montes) y Gabriel Folgado (inolvidables sus Paisajes interiores y Ancestral Delicatessen) 

En La Térmica cultural, que se está convirtiendo en un espacio cultural esencial en el panorama berciano (la expo de Sorolla ha sido otro ingrediente estupendo https://cuenya.blogspot.com/2025/09/expo-dedicada-sorolla-en-ponferrada.html), Rodrigo actúo en compañía de Sofía Miguélez, que es también una gran acordeonista, a la que me gustó escuchar por primera vez cómo toca con magia el acordeón, un instrumento que me fascina. Espero que no sea la última porque Sofía Miguélez me pareció muy buena. Luego uno se entera de que vivió en Francia (donde escribió música original para espectáculos), aprendió a caminar moviendo los pies al son de la música, que canturreaba a todas horas y con un tecladito iba tocando de oído todas las melodías que escuchaba. 



Tener oído es fundamental para dedicarse a la música, el arte más sublime de todos, como alguna vez he llegado a escribir, porque la música es un lenguaje universal que tiene el poder de despertar nuestras emociones y conectarnos con nuestro yo más íntimo, porque la música expresa aquello que no puede ser dicho, un arte que nos taladra las entrañas. Escuchando tocar el acordeón a Sofía Miguélez (que forma parte del grupo Prieto Picado) me trasladó a la música balcánica, con bandas como Fanfare Ciocarlia https://cuenya.blogspot.com/2014/05/sones-rumanos-en-el-bierzo.html, Esma Redzepova, Taraf de Haïdouks https://cuenya.blogspot.com/2018/10/sanfroilaneando.html o el propio Goran Bregovic, músico serbobosnio al que he podido escuchar en concierto en más de una ocasión https://cuenya.blogspot.com/2010/03/goran-bregovic.html  https://cuenya.blogspot.com/2017/10/goran-bregovic-en-lugo.html, y autor de bandas sonoras para películas del músico y cineasta serbio Emir Kusturica. https://cuenya.blogspot.com/2025/01/emir-kusturica-y-el-tiempo-de-los.html

Rodrigo y Sofía me deleitaron con su directo, con su Bura, sobre canciones de la tradición leonesa con influencias contemporáneas. Para la composición de este disco, titulado Bura, su autor Rodrigo Martínez ha contado con las colaboraciones de la mencionada Sofía Miguélez. además del paisano berciano Amancio Prada o Diego Gutiérrez, entre otros grandes músicos. 


«Al repertorio, centrado en la música tradicional de la provincia, he tratado de imprimirle un carácter más contemporáneo, forzando las armonías a esquemas mas complejos y ricos, pero respetando lo hermoso de las melodías tradicionales...», dijo Rodrigo hace tiempo acerca de su música. 


Una gran emoción he sentido escuchando en concierto a Rodrigo Martínez en compañía de Sofía Miguélez. Emociona esa música tradicional leonesa sentida con tanta pasión, tocada con tanto mimo y destreza, reescrita en clave contemporánea. Un placer inmenso. Mi enhorabuena para ellos. Larga vida les deseo a Sofía y Rodrigo porque son músicos excepcionales. Orgullosos estamos los leoneses de tenerlos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario