Siempre es un motivo de festejo la edición de la revista La Curuja porque, a medida que transcurre el tiempo, resulta tal vez más complicado sacarla adelante. Así que celebramos haber llegado al número 30 de la segunda época, con las inestimables colaboraciones de la filóloga y traductora berciana Álida Ares (acaba de realizar la traducción de Canto por Europa, del escritor italiano Paolo Rumiz), la cual reside en la Región de Trentino-Alto Adige (Italia) desde hace años. Y precisamente nos obsequia con un texto ilustrado, Desarrollo sostenible, en el que nos muestra cómo esta tierra del norte de Italia comparte con la comarca del Bierzo muchas características sociales y geográficas.
Por su parte, el
nocedense Javier Arias Nogaledo, habitual colaborador de La Curuja, nos
adentra en el territorio mítico de la infancia a través de sus recuerdos en
Noceda. El título de su artículo, Rilke en Noceda, hace precisamente
referencia a aquello que nos dijera el poeta acerca de la infancia como la
verdadera patria. “Esos años de la infancia y pre-adolescencia han quedado
marcados a fuego, con esa cuasi libertad absoluta”, apostilla Arias Nogaledo.
La periodista y escritora Camino Pastrana nos habla de sentimientos, emociones y de inspiración a resultas de su participación en el pasado encuentro literario en Noceda del Bierzo.
“Si la llegada de las nuevas tecnologías es un hecho
absoluto, que al menos el alma nos salve de lo artificial para que la
inteligencia sea siempre la conquista del corazón”, escribe Camino bajo el título de El viento no se lleve las palabras.
La
escritora Elisa Vázquez, quien también intervino en el encuentro literario de
2023 en Noceda del Bierzo, nos ofrece un relato breve titulado Vejez,
escrito con gran sentido del humor, lo cual se agradece, sobre todo en estos
tiempos convulsos.
El
nocedense Ramón González Vega dedica su texto a Carlos Cabezas, que fue un
visionario y emprendedor, el cual tuvo la brillante idea de poner en marcha un
molino, una serrería y una “fábrica de electricidad” a finales de los años 20
del pasado siglo en la zona del Mouro de Noceda.
El
catedrático de la Universidad de León en el Campus de Ponferrada Alfonso
Fernández-Manso nos acerca la población de Labaniego (perteneciente al
municipio de Bembibre), que él define como “aldea del bosque encantador”, un
territorio singular en cuanto a la masa forestal de robles y encinas, donde
también se hallan castros y corones y existió el monasterio medieval de San
Fructuoso.
Para
finalizar este recorrido, uno mismo, como coordinador de la revista, le dedico una reseña al artista polifacético Víctor Ruisánchez Ossorio, que es el autor
de la foto de portada de este número, y cierro la edición con
un homenaje a dos personas queridas, César González García y Benjamín Rodríguez
Nogaledo, que fallecieron el pasado año en Noceda del Bierzo.
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